Nos explica con mucho detalle que los principales ingresos de Israel son en estas tres ramas: Turismo de pregrinación, los diamantes y tecnología.
En el primer caso, Israel recibió un poco más de tres y medio millones de turistas en 2013, de los cuales, casi tres millones realizaron una peregrinación por Tierra Santa.
En segundo lugar está el mercado de diamantes. Aunque Israel no tiene minas, se ha distinguido por tener a los mejores talladores de diamantes. Esa capacidad se ha mantenido como herencia, pues durante los casi dos mil años de dispersión, los israelitas al ir de un lado a otro, llevaban grandes tesoros en pequeñas bolsas de cuero. De manera que en casa los jóvenes eran enseñados por el papá a tener paciencia para tallar y tallar esas pequeñas piedras y darles un gran valor, luego eran enseñados para negociar con habiliadad sus obras de arte. Ahora ya no tienen que moverse de un lado a otro, pero la experiencia ha quedado y ese conocimiento los ha llevado a mantenerse como los grandes pulidores y negociantes con diamantes.
En tercer lugar está la tecnología. Hay tres vertientes principales donde Israel ha hecho verdaderas aportaciones al desarrollo tecnológico.
La primera provocada por la escasez del agua, Israel es pionero en la aplicación de riego por goteo, la desalinización del agua y la producción de alimentos en invernaderos, así como la creación de los primeros calentadores solares.
La segunda también provocada por la necesidad, pues la hostilidad de los paises vecinos es conocida por todos, de manera que Israel ha desarrollado tecnología para defensa militar y por último: muchos de los desarrollos electrónicos y computacionales han sido hechos en lo que se conoce como Silicón Wadi. Intel, IBM, Microsoft, AOL, Cisco, y otros más tienen grandes oficinas en esa área. El Windows XP fue desarrolado por israelíes, así como el ICQ, Wase (vendida a Google), Viber, Storedot, Repeticiones en 360°, etc.
De manera que el pueblo de Israel, ha aprovechado las dificultades para salir adelante.
